Bienvenidos.....Los estaba esperando



sábado, 19 de mayo de 2007

Dos soles y una luna

Como todos los días, ella se levantó de prisa. Todavía algo somnolienta, se dirigió al baño. El sol apenas asomaba algunos tenues rayos en el lejano horizonte. Después de unos minutos para el aseo personal, preparó el desayuno y organizó mentalmente todas las actividades del día: ir al trabajo, al regresar pasar por los niños, lavar la ropa, cocinar, ¡ah¡ pagar los servicios que ya, por cierto, se habían vencido. De manera mecánica, fue recogiendo la ropa de los niños, del esposo, la dejaría remojando en la lavadora, para ahorrar algunos minutos. Hace ya mucho tiempo, este ahorro se había vuelto una obsesión. Su vida era el producto de una ecuación: a mayor tiempo ahorrado, mayores cosas por hacer, menor tiempo para sentir la inmensa soledad que la rodeaba.
Mientras le daba vida a toda la casa, recorriendo sus rincones, se disponía para la primera acometida del día: hacer que los hijos se prepararan para ir a la escuela, antes de que llegara el trasporte escolar. Después de varios llamados, buscó los recibos de los servicios, cuando encontró una carpeta que había rotulado: “Cosas por Hacer”. La ojeó rápidamente y encontró el recorte del cine que nunca fue a ver, la blusa que no logró comprarse, el hombre que nunca sería suyo, las hojas marchitas de la única flor que recibió en su vida. Sonreía irónicamente cuando un grito infantil suspendió sus pensamientos: MAMAAAAA....Ya los rayos del sol penetraban fuertemente toda la casa.

Él estiró todo su cuerpo, con movimientos perezosos. Le llegó un perfumado olor a café mañanero. El sol encandiló sus ojos. Recordó haber prometido conversar con su hijo, ese día. -Mi muchacho es todo un varón - pensó, y se sonrió recordando las travesuras que le contó su mujer, la noche anterior. A lo lejos le pareció escuchar una voz “Hasta luego”. Su cuerpo, todavía adormitado, no reaccionó al instante. Tenía algunas tareas que cumplir en la oficina, después iría con los compañeros a tomar cervezas, era importante un poco de esparcimiento. A Martha la vería mañana, pensó que debía planificar algo especial para ella. Estaba satisfecho con su vida: casa, familia, amigos y “amigas” Era un “tipo” con suerte. Se volvió a estirar, una rápida mirada al reloj le permitió decidir que podía dormir un rato más, vio en el perchero su ropa planchada, el olor que percibía le informaba que el desayuno estaba listo. Por lo tanto disfrutaría de un rato más de un bien merecido descanso

El día transcurrió y llegó la noche. Salio la luna y alumbró la cama. Dos seres se reencontraron. Iluminados por su luz, iniciaron un gélido ritual de amor, tan vacío, tan distante de la fantasía de cada uno, que el satélite opacó su brillo y se alejó en el espacio sideral buscando al amor en otra parte.

martes, 8 de mayo de 2007

Profanación

…Vertió en mí su semen, sin ni siquiera mirarme a los ojos. No le importó invadir mis entrañas adoloridas. Todo su ser vibraba con movimientos epilépticos que obligaban a su alma a salir del volcán del deseo, deseo vuelto lujuria jadeante. Quedo así, sin un vestigio de lo humano…sin protección divina... y la necesidad animal tomó el control, anulando recuerdos, sentimientos, promesas. . Solo invadió mi cuerpo y dejo su semen…

domingo, 6 de mayo de 2007

Los ancianos … ¿un problema de la sociedad tecnocrática?

La concepción de la vejez en la Venezuela contemporánea plantea, desde su carácter humano y colectivo, algunos determinantes que preestablecen el quehacer del adulto mayor durante los últimos años de su vida. En esta etapa vital, sobre todo cuando no se ha planteado un proyecto personal para la madurez, la persona parece delegar la decisión de su futuro a las opciones que le ofrece el entorno inmediato: cuidar los nietos, estar a la orden de las necesidades familiares, o vivir planificando reencuentros con los hijos.
¿En qué momento pierde el hombre o la mujer su estatus de ciudadano participe, protagónico y responsable de los procesos de transformación de su propia vida? Para responder a este planteamiento, se necesario hacer una primera aproximación a la concepción de persona, desde una orientación socio- humanista, que articule la concepción del país- sociedad- familia- persona, esta última en interacción constructiva con su medio y con otras personas, en función de la consecución de un objetivo común: una vida de calidad, desde la auto y hetero realización integral, en igualdad de condiciones
Esta concepción refiere el carácter cultural, histórico y social de la persona, presentándola como protagonista y responsable de su destino. En tal sentido, la persona adulta puede participar y cooperar, de manera permanente, en la construcción de su propia realidad, en la medida de sus posibilidades. La toma de decisiones sobre la atención de las necesidades que mejoren la calidad de vida del adulto mayor, puede estar determinada por sus posibilidades de planificar, de manera proactiva, acciones que conlleven, con cierto grado de seguridad, al logro de este objetivo. Pero igualmente debe referirse el papel de la sociedad, a través del Estado, la familia, las organizaciones de apoyo social, como entes responsables de garantizar la satisfacción de sus necesidades básicas, como derecho fundamental.
Es importante destacar, dentro de las necesidades básicas, la educación continua. La vida y la educación son procesos inclusivos que acompañan a la persona de manera permanente. En tal sentido, deben ofrecerse oportunidades para continuar su proceso de formación integral, tomando en cuenta su derecho a la participación social. Pero, los efectos de la cultura tecnocrática han influido de manera determinante en la vida del adulto mayor. Habiendo sido, en muchas ocasiones un profesional exitoso, se convierte en la edad adulta en el depositario de la sabiduría anacrónica, en un marco socio-cultural, donde la decadencia de la experiencia, como valor, es cada vez más evidente. Desde su supuesta obsolescencia profesional, su inserción a las posibilidades tecnológicas es considerada inútil.
Es así como el análisis situacional plantea, en instancias de intervención social, un problema básico de administración de políticas que aseguren la atención al desarrollo del adulto mayor, en el marco de su contexto socio histórico determinado. Este es un derecho que no debe ser discutido sino exigido en todos los niveles etarios de la población De esta manera se propician procesos de transformación individual y social, a partir de las potencialidades multidimensionales de todo ser humano, con amplias posibilidades de actuar de manera creativa y responsable, en situaciones contextualizadas. Una sociedad inteligente y efectiva, no sólo aprovecha al máximo su potencial humano, sino que lo dignifica.
En este orden de ideas, ¿es posible plantearse, en el marco de una cultura tecnocrática, la posibilidad de un adulto mayor con alta autoestima, satisfecho de los logros que ha generado su actuación de vida, autorrealizado y feliz? ¿cómo integra en su proyecto de vida, de manera estratégica, una madurez moderna y transformadora, plena de experiencias de aprendizajes y enseñanzas, en un entorno que le preestablece su campo de acción?

Ciudadanos Adultos Mayores……., liberaos

Los azules ojos de mi madre

Llenos del amor que nada pide a cambio.
Azules como el mediterráneo, con sus múltiples matices
No los cerrabas para cuidarnos minuto a minuto,
hasta que Dios así lo quiso y se llevó su resplandor.
Irradiaban tus fuerzas de mujer y nos hablaban de esperanza,
del "haz bien y no mires a quien", de la humildad por encima del orgullo, del hermano que nos necesita, de lo maravilloso que es un niño...
Como flores buscaban el sol y tomaban su calor, para calentar suavemente el alma acongojada de sus hijos.
En tus ojos, la angustia se esfumaba y me arrullaba su suave contemplación que contrastaba
con tu carácter de mujer de la postguerra europea,
Esos ojos de los cuales borraste temores, tristezas, angustias, para que no se asomaran en un momento de descuido y nos asustaran la vida
Tu mirada se grabó en lo mas hondo de mi alma y
me acompaña en el día a día.
En ocasiones, el recuerdo se hace débil ante los embates de la vida. Entonces te busco en otros ojos azules y no te encuentro, la desesperanza se apodera de mi ser y de nuevo, la luz azul llena el universo.
Son los ojos de mi madre que me recuerdan su inmenso amor.
Me reconcilio con la vida, con la esperanza, con ese Dios que un día, necesitó cerca los ojos azules de mi madre y la llevó a su lado, para entibiar su corazón, como siempre lo estará el mío.